"Danse Macabre: Navegando la Tormenta del Alma en el Rio de la Vida"
Título: Navegando a través de la Tormenta: Recuperando el Equilibrio en Tiempos de Dificultad
En la danza de la vida, enfrentamos estaciones de abundancia y plenitud, donde cada movimiento se siente en sincronía con la melodía del universo. Sin embargo, también hay momentos en los que parece que hemos perdido el ritmo y cada paso es un esfuerzo agotador. El comienzo de este ciclo solar ha sido uno de esos períodos para mí.
Como chamán, tengo una conexión profunda con la naturaleza y los ciclos de la vida. Había trazado mi curso para este año con cuidado y detalle, preparándome para recibir las bendiciones y desafíos por venir. Sin embargo, a medida que el río de la vida fluye, a veces nos arrastra en direcciones inesperadas.
Mis compromisos familiares y mi dedicación a la creación del Curso del Oráculo de Huesos se entrelazaron, llevándome a un territorio desconocido. Me encontré con un retraso en contra de mi planificación original, y la presión de terminar mi trabajo y mantener el equilibrio con mi vida personal comenzó a pesar. ¿Debía posponer el lanzamiento hasta mayo, permitiéndome tomar un respiro, o acelerar y mantener el rumbo original? Escogí la última opción, sin saber que estaba navegando hacia la tormenta.
Las dos primeras semanas fueron una maratón para lanzar el Curso del Oráculo de Huesos. Aunque logré mi objetivo, no contaba con la realidad de mi nueva vida. Ya no era un lobo solitario, sino un ser unido a otro, viviendo en una comunidad. Mi compañera de vida anhelaba compartir momentos conmigo, y yo, a su vez, anhelaba estar con ella. Mi objetivo de equilibrar mi trabajo y mi vida personal parecía cada vez más lejano.
La tormenta llegó en pleno apogeo. Las responsabilidades se acumularon y me encontré en lo que los jugadores de póker llaman "tilt": un estado de frustración y presión donde cada intento de avanzar solo parece empeorar las cosas. Mi productividad cayó, las tareas más simples se convirtieron en montañas y cada mañana se convirtió en un intento desesperado de recuperar lo perdido.
El 'tilt' es un fenómeno que trasciende los juegos de azar y puede manifestarse en cualquier aspecto de nuestras vidas. Es un período de tormenta en el que parece que todo lo que intentamos fracasa, y cada esfuerzo solo empeora las cosas. Es un estado de frustración y enojo que nos lleva a tomar decisiones impulsivas y a rendir muy por debajo de nuestro potencial.
Si has experimentado esta tormenta, sabrás que no es un viaje agradable. La clave para navegar a través de ella y minimizar los daños es simple, pero no fácil. Permíteme compartir contigo las herramientas chamánicas que me han ayudado en mi propio viaje a través del 'tilt'.
Lo primero es reconocer que estás en este estado. Es fácil caer en la trampa de intentar arreglar todo rápidamente, pero este enfoque solo alimenta la tormenta. En lugar de eso, haz una pausa, respira y acepta que estás en medio de la tormenta. Entonces, y solo entonces, puedes comenzar a trazar tu camino a través de ella.
Estas son las enseñanzas que he recibido en mi propio viaje a través del 'tilt'. Si te sientes llamado a explorar más sobre el chamanismo ancestral y cómo puede ayudarte a navegar a través de las tormentas de la vida, te invito a visitar nuestra web de cursos.
Recuerda, cada tormenta pasa y cada invierno es seguido por una primavera. Mantén la fe, sigue bailando y pronto encontrarás tu ritmo nuevamente.
Había una vez, en los rincones secretos de Budapest, una saga de desafíos que me llevaron a un paraje de introspección y renovación. Mientras estaba inmerso en la creación de videos, me enfrenté a obstáculos que amenazaban mi paz interior. Para surcar las aguas tumultuosas, decidí que una solución posible era sacrificar el sueño en el altar de la productividad. Sin embargo, este sacrificio no trajo los resultados deseados. En lugar de navegar con más velocidad, me encontraba luchando contra las corrientes de la fatiga y la disminución de la concentración. El tiempo para crear los videos parecía estirarse, y la frustración florecía en el jardín de mi mente.
Un día, poco antes de mi regreso a España, me enfrenté a una tormenta interna. Mi mente, normalmente fluida y resiliente, parecía haberse quedado atrapada en arenas movedizas. Pasé cuatro horas en un intento desesperado de crear un video de cinco minutos, un esfuerzo que resultó infructuoso. Fue entonces cuando me percaté de la inutilidad de luchar contra la corriente y decidí aceptar el flujo de la vida.
Si alguna vez te encuentras en una situación similar, no es necesario que llegues a ese extremo. Si notas que después de varios días tus esfuerzos parecen naufragar, puedes estar experimentando una fase de 'tilt', un estado mental de caos e inestabilidad. En ese caso, quiero recordarte un antiguo consejo chamánico: detente, respira y reconecta con tu espíritu.
En el 'tilt', nuestras almas parecen desorientadas, y nuestras decisiones se vuelven borrosas y confusas. Nuestras acciones pueden alejarse de nuestra verdadera esencia, y somos susceptibles a cometer errores que pueden agravar nuestro estado mental. En estos momentos, es vital tomar un respiro y dar un paso atrás de nuestras labores diarias.
Al igual que un árbol en invierno se desnuda de sus hojas para renacer en primavera, también nosotros debemos soltar y permitir que nuestros problemas e inseguridades se desvanezcan. Pasé dos días en un retiro espiritual de la tecnología, dedicándome a actividades que alimentaban mi alma: leer, ver películas, practicar capoeira, yoga y descansar.
Después de unos días, sentí que una ligereza y una paz interior regresaban a mi ser. Mi alma se curaba y mi sonrisa volvía a florecer.
Cuando sientas que la tormenta interna ha amainado y tu mente ha recuperado su claridad, es momento de reevaluar tu situación y determinar tu próximo paso en el camino de la vida. Puede que la tormenta haya causado algunos daños, pero no te tortures con remordimientos. En lugar de eso, pregúntate: "Dada mi situación actual, ¿cuál es el mejor paso a seguir?".
Para mí, implicó aceptar la pérdida de varios días productivos y la imposibilidad de concluir todas las tareas que tenía planeadas. Sin embargo, elegí aprender de esta experiencia y aprovechar al máximo el tiempo que me quedaba.
En conclusión, recuerda siempre que aunque te encuentres en medio de una tormenta, también tendrás la oportunidad de encontrar calma. Aunque puedas sentirte tentado a caer en comportamientos autodestructivos, recuerda que siempre hay consecuencias. Las fases turbulentas son transitorias y eventualmente, las cosas volverán a su cauce.
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